Se tornó insostenible, si River hubiera jugado con ese ímpetu, con esas ganas extremas con las que disputó hoy cada balón todos los anteriores partidos, otra seria la historia, pero no fue asi. Fue un equipo timorato, mezquino, vacío de contenido y los culpables son los que armaron el equipo , dirigentes inoperantes que sobraron la situación, que se aprovecharon de este enorme club para despedazarlo, destruirlo, le sacaron el alma le rompieron el corazón, lo envenenaron hasta dejarlo sin aire.
Imagen triste la de los jugadores en la mitad de la cancha al término del partido, reunidos, llorando desconsolados, chicos que nacieron aquí, que son de las entrañas, de la raíz futbolera de pura cepa.
Muchos de ellos ya no estan hoy y fueron echados, desperdiciados seguramente, dejados de lado, llámense Ludueña, Franco, Lima, Toranzo, Conca y la lista continúa.
Echaron a formadores como Delem, no cuidaron a ídolos, no protegieron toda una historia gigante que jamás sera borrada pero que, ya esta inundada de tristeza y decepción. Estos y los anteriores dirigentes quedaran manchados para siempre por desprestigiar al mas grande club de fútbol de Argentina, algunos por creerse dioses y otros por negligentes e irresponsables.
También el socio que votó a Aguilar y a Pasarella tendrá que hacer el mea culpa correspondiente, y los que erraron en decisiones, algun día tendrán que salir a decir que se equivocaron, pero la verdad no he visto ese supremo gesto de dignidad todavía y creo que tampoco lo veré.
River tocó fondo y descendió de categoría. Pronto volverá a subir para quedarse en primera nuevamente pero para eso seráq necesario que este presidente actual de un paso al costado.
Será cuestion que tome las riendas gente que sepa de verdad lo que hacer y que tenga sobre todo la capacidad de conducir este gigante al que han dormido, sedado y sepultado futbolisticamente.
